martes, 2 de diciembre de 2014

SÍNTOMAS MÁS COMUNES QUE SE VEN EN LAS EMPRESAS


Si queremos hablar de éxito, parece contradictorio que empecemos hablando del fracaso. No obstante, lo lógico es empezar por ahí. 

Tan importante es saber lo que se debe hacer como lo que no se debe hacer

Estoy seguro de que conoce esa famosa estadística según la cual 9 de cada 10 empresas tienen que cerrar antes de cumplir su quinto año de vida. Puedo decirle que, por experiencia personal, esta estadística es totalmente cierta. 

Tras varios años ejerciendo como profesional de la gestión empresarial, he visto muchos casos de empresas y organizaciones que fracasaron y he podido analizar las causas que llevaron al proyecto al fracaso. Casi todos los casos pueden agruparse dentro de estas las  causas que señalo en mayor o menor medida..

·         El personal desconoce sus objetivos y metas de trabajo.
·       Adolecemos de adecuados sistemas de reclutamiento, selección y contratación de personal.
·         No se atienden las verdaderas necesidades de capacitación.
·         Tenemos gente obediente, pero no participativa.
·         Falta de Integración del Personal con la Organización.
·         Altos índices de Rotación de Personal.
·         No existe un sistema de comunicación adecuado en la organización.
·         Falta de motivación y reconocimiento al personal.
·         No existe la estandarización y control de los procesos.
·         Mala calidad de los productos y servicios.
·         Baja Productividad por falta de ventas y/o por falta de liquidez.
·         Desconocimiento del marco regulatorio legal de las empresas.
·         Desconocimiento detallado de la Estructura de Costos.
·         A pesar de que mis ventas están aumentando mi margen de utilidad disminuye.
·        Toma de decisiones inadecuadas por el mal uso o desconocimiento de los Estados Financieros de la Empresa


Convendrá conmigo en que conocer las causas del fracaso, le ayudará a evitarlo en la medida de lo posible

¿QUÉ TAN SANA SE ENCUENTRA SU EMPRESA?


 “Vivimos en un ambiente empresarial carente de cultura de consultoría. Todos los problemas que se presentan tratamos de resolverlos por nosotros mismos, no concedemos ninguna oportunidad a personas que ya han vividos nuestros problemas y que incluso de han preparado para ayudar a quienes lo necesitan.

Cualquier persona que tiene un hijo pequeño y de repente le encuentra “manchitas rojas” en la cara, no duda en correr a ver un médico para que le diga lo que tiene su hijo; lo somete al tratamiento que el médico le señale y el niño se alivia; imaginemos que él mismo tratara de averiguar, primero, que tiene, y, luego, tratar de curarlo con sus propios métodos, probablemente perderíamos muchos niños.

No obstante, si esa misma persona tiene un pequeño negocio y le encuentra esas “manchitas rojas” en los estados de resultados (si los tiene), lejos de pensar en consultar al especialista trata de averiguar que anda mal y toma las decisiones de solución, que no siempre son las más acertadas, a veces son más perjudiciales para el negocio”.

Las Empresas tienen vida, nacen, crecen y, dependiendo de las habilidades del empresario y de su equipo, puede pasar de micro a pequeñas, medianas y hasta grandes corporaciones, o bien terminan, lamentablemente muy a menudo, padeciendo enfermedades terminales que las llevan a la extinción.

En realidad parecen ser pocos los expertos que han logrado comprender el metabolismo de la empresa. También son pocos los empresarios capaces de garantizar la salud de sus negocios y entender su pulso. Los problemas cotidianos de operación consumen, en gran medida, el tiempo y los recursos del empresario y las pequeñas dolencias que pasan inadvertidas hasta que ya es demasiado tarde.

Incluso un empresario se da cuenta de los síntomas de un padecimiento empresarial agudo, en su mayoría confían que un remedio rápido y económico que sanará a la empresa con la ayuda del tiempo.

Como Consultor de empresas presto servicios profesionales en cualquier ámbito administrativo, gerencial, económico, financiero legal o técnico detectando los síntomas de cada padecimiento y a partir de ellos  propongo diagnósticos precisos, tratamientos y dosis para su curación, así como líneas de seguimiento